Algo he estado leyendo y mirando.
Y me queda esa sensación de nuevo de cuando uno no puede explicar bien que pasa. Siento que en tantas palabras distintas se refleja lo que quiero decir, pero no es una sola idea, sino algo más allá.
Algo que sé que Linda entiende, y que por eso seguimos conversando.
Ese sentimiento de que el puzzle donde encajabas cambio, o mejor dicho, tu como pieza, cambiaste, y ya no encajas, no a la perfección como solía ser. Ya no esta tu lugar. Mi casa ya no es mi casa. El hogar se disuelve.
Es como vivir en dos mundos paralelos. Es dificil hacerlos conversar, o más bien tampoco me interesa hacerlo. Es como sé que vivo en esta vida, pero también sé que tengo una vida oculta
Y es que acaso esa otra persona, es más yo? que yo misma? Cual sería la verdadera?
Tampoco son tan distintas. Pero ciertamente, no son iguales.
Hay algo que crece, que cambia. Es un sentimiento nuevo. De que nada es imposible. Y te haces más conciente de las amarras falsas que existen.
Y me cuesta explicarle a Eima, o a Jamie, que no son cosas reales.
Pero bueno, supongo que no todos pueden enterderlo.
La cosa, es que no es suerte.
