pasa que ese día teniamos que irnos de nuestra isla maravillosa. El problema es que estabamos en una playa a 6 horas del aeropuerto y nuestro vuelo era a las 4 pm. Pero habían dos camionetas, una que se iba a las 6 am en punteli y la otra al rededor de las 12 (entiendase que puede ser a la 1 o las 2 porque esta gente tiene una visión del tiempo suuuuuuuuuper relativa).
Así que no nos quedo otra que levantarnos a las 5, ducharnos, empacar e irnos. Igual los buena onda que administraban el bungalow, nos preparaon desayuno tempranito, y esta foto, es mientras esperamos el desayuno.
Igual me gustaría haber comido menos en el desayuno, porque el camino de vuelta fue infartante. El gallo se fue a mil por hora todo el rato, adelantando como loco, sin importar que venían autos de frente, tocando la bocina cada medio segundo. Rachel se quedo dormida y me dijo que prefería morir en sus sueños y que ya estaba con ataque histerico con las habilidades de manejo de nuestro chofer... mientras que yo lo unico que decia era HATI HATI!!!!!!!! cada 10 segundos, que significa CUIDAO CTM!!!!!!!! lo bueno es que llegamos sanas y salvas, y después de micros y cosas para llegar al aeropuerto, disfrutamos de las cosas simples de la vida, o lujosas en esas situaciones, un cafe del Starbucks, y nos hicieron miles de regalitos y un gallo me pidió matrimonio. Hubiese dicho que sí, pero en verdad que me tenía que ir a Bali. No te he olvidado mi amor. Algun día nos reencontraremos.
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